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1.¡Fantasea!
Lo repetimos a menudo, pero es verdad: en las mujeres, el orgasmo pasa ante todo en la cabeza. Para alcanzar la cumbre del placer, toma tu tiempo para fantasear y mantener tu libido. Las novelas eróticas están de moda y puedes encontrar en cualquier librería. ¡Solo tienes que elegir la que más te guste! ¿Y por qué no cambiar el último episodio de Juego de Tronos por una película erótica, o incluso porno? Si te apetece, puedes probar esta experiencia en compañía, y quizás os dé ideas y haga trabajar vuestra imaginación. ¡Placer asegurado!
2. Sigue tus deseos
Para disfrutar, ni hablar de imponer prácticas sexuales con las que no te sientes cómoda. ¿Prefieres hacer el amor con la luz apagada? ¿Quieres música? ¿No te gusta tal postura? Dilo sin dudas. Impón tus deseos y aprende a pensar en tu placer antes que nada. Es la mejor forma de lograr el séptimo cielo y seguro que tu pareja estará entusiasmado.
3. Toma la iniciativa
No esperes que el placer venga de tu pareja en la cama: ¡Toma la iniciativa y ve tú misma a buscarlo! ¿Cómo? Tomando las riendas, cambiando de posición, dominando tu pareja sexual. Así, el placer llegará mucho más fácilmente. ¡No te preocupes, tu pareja seguramente apreciará, y mucho, que tomes las riendas!
4. Practica en solitario
La masturbación ya no es un tabú, y numerosas mujeres la practican. Pero muchas otras no lo hacen, bien porque no se atreven o bien porque no sienten el deseo de hacerlo. Pero el camino se hace caminando. El placer en solitario, es un momento de intimidad solo para ti y es la ocasión perfecta para descubrir tu cuerpo, de sentirte más a gusto y de explorar tu placer. Disfrutar del placer tú sola es multiplicar las oportunidades de alcanzar el orgasmo con tu acompañante.
5. ¡Desmitifica el orgasmo!
El orgasmo es genial, pero el placer ya vale la pena, ¿no? Si ves el orgasmo como un fin en sí, un objetivo, sin duda tendrás dificultades para alcanzarlo. Vive el momento, déjate invadir por las sensaciones y las emociones sin pensar en el orgasmo. Deja tu cuerpo recibir lo que le es dado y el placer que sentirás podría sorprenderte.
