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• Sé espontáneo/a
Es un hecho, la rutina y el aburrimiento son los principales enemigos del amor. De hecho a menudo son los motivos por los cuales se busca la felicidad fuera de la pareja. Así que no cometas los mismos errores con tu amante y demuestra tu espontaneidad. Llévale al cine, al teatro, a un concierto, no importa donde, pero sorprendele. Una relación extraconyugal a menudo está aislada, escondida. Así que es indispensable encontrar la manera de ser felices juntos. Ya que si la rutina ha sido un problema en tu relación de pareja, lo más seguro es que no seas más tolerante con tu amante. ¡Necesitas soñar y él también!
• Evita las discusiones acaloradas
En pareja, hay temas que es mejor evitar para no acabar la velada cada uno por su lado. ¿Qué pareja no se ha tirado los platos a la cabeza durante una discusión acalorada acera de las tareas del hogar? Con tu amante, es exactamente igual, aunque los temas de la discordia sean diferentes. Evita por ejemplo hablar demasiado a menudo de tu pareja oficial o de tu familia si no os sentís ambos totalmente cómodos con este tema, o esto podría causar pequeños roces.
• Acepta sus defectos
Él no es perfecto y tú tampoco. Con tu pareja oficial, es difícil dejar de lado los pequeños cambios que te gustaría ver en su comportamiento, porque comparte tu vida. Pero no olvides que un amante es solo eso, y que si tiene defectos realmente insoportables siempre estás a tiempo de buscarte a otro.
• Hazle cumplidos
Si se es infiel, es también para sentirse de nuevo seductora y admirada. Así que es esencial mostrar a tu amante que te gusta y cuánto aprecias sus muchas cualidades. Tras varios años de relación, es más fácil criticar que hacer cumplidos, y esto en parte es lo que roe el equilibrio en la pareja. Acuérdate pues de apreciar los pequeños detalles que hacen de él el amante que has elegido. Recuerdale hasta qué punto es excepcional; es un hombre, lo necesita.
• Escuchale
Aunque no seas psicóloga y que ya tengas tus problemas en casa, el amante no está ahí solo por los revolcones bajo las sábanas. Es un amante, pero también y sobre todo un hombre, y como tú necesita comunicar. Acepta que durante vuestros encuentros no siempre sea todo sonrisas y escucha lo que tenga que decir cuando parezca atormentado. No te cuesta nada y si elige hablar contigo y no con otra persona es que vuestra relación es sólida.
• Pon normas
En tu pareja oficial, los límites infranqueables son esenciales y determinan las bases mismas de vuestra relación. Con un amante, esto es dos veces más importante. Y es que vivir una aventura extraconyugalel es embriagador pero no tiene porqué ser relajante. Así pues, si quieres que vuestra historia dure, asegurate desde el principio que ambos estéis en la misma onda. Sé clara sobre lo que esperas de esta relación y sobre la forma en que la percibes.
