El miedo a quedarse solo

Inscripción

Discreción
100% garantizada

Me registro


Encuentros fiables y discretos con toda tranquilidad
Una única regla: no hay identidades falsas
¡Miles de miembros ya inscritos cerca suyo y en el mundo entero!

categoría: Actualidades

El miedo a quedarse solo

El problema a menudo se atribuye solamente a las mujeres, pero también implica a los hombres. Nadie está excluido de este temor que parece acompañar, hoy más que antes, a nuestras sociedades: el miedo a quedarse solo.

En un momento en el que realmente no se puede quedarse solo, dado a los diferentes recursos puestos a disposición por la tecnología: teléfonos móviles, Internet, Facebook, mensajería, el mayor miedo parece seguir siendo la soltera y no tener a nadie con quien compartir nuestras vidas.

La pareja se convierte así en una especie de refugio de una tormenta interior que no se puede apaciguar. Y si las cosas no funcionan correctamente, los llevamos hasta el agotamiento, guiados por el miedo habitual que tenemos de no lograr nada solos.

Es este miedo que hace que el otro se convierta en todo nuestro mundo: vivimos para él o para ella, construimos nuestro presente y nuestro futuro con esa persona. El / ella ocupa todo el espacio en nuestras vidas. Y ¿qué pasa cuando termina la historia? Nos sentimos perdidos, vacíos, no hay razón para vivir.

Si uno se detiene a pensar, nos damos cuenta que realmente es ridículo dejar de querer vivir por alguien que nos dejó, pero sabemos que el amor no es una cuestión de razonamiento.

¿La solución? No viva para una sola persona, sino por usted mismo. Tendrá todo para ganar. El mundo no se desmorona alrededor de nosotros si él o ella nos dejó. Nosotros seríamos más fuertes y más indiferentes a lo que veíamos como una gran catástrofe. Todo esto no significa quedarse solo, por el contrario, significa que usted necesita saber rodearse sin crear una dependencia.

Es por eso que el concepto de la pareja debe ser corregido, porque ninguna pareja es eterna. Usted debe ser capaz de situar al centro de su vida, nosotros mismos debemos ser los protagonistas y directores de nuestras vidas. Sólo de esta forma el miedo se desvanecerá.